The Darkside of TextBooks ← Linda Castañeda. Ser profesor tiene una carga ética y política innegable e ineludible.
Cuando empecé a estudiar pedagogía creía que esa carga era eso, una carga, y por lo mismo suponía un fastidio y una parte que debía ser eludida en la medida de las posibilidades de los docentes. Pero conforme he ido estudiando –o bebiéndome- la carrera –y encontrándome con diversos profesores- me di cuenta que la carga en cuestión, era además de una carga , una responsabilidad.
Que la educación no pretende un ciudadano cualquiera, que el modelo de formación y facilitación del pensamiento, no responde a un planteamiento vital neutro. Punto Neutro, la última cesión a las editoriales de libros de texto. Estos últimos días el Ministro Wert, dentro de sus continuas apariciones públicas (aunque, últimamente, da la sensación que le tengan bastante escondido) ha anunciado en diferentes medios de comunicación la puesta en marcha del Punto Neutro.
Algo que, a su entender, permitirá abaratar los costes de los libros de texto y posibilitar una mochila digital que pese menos en la espalda de nuestros sufridos estudiantes. Un entorno virtual donde se podrá gestionar la compra y venta de los libros de texto, en formato digital (permítanme que me ría después de haber visto qué significa eso de digital para la mayoría de las editoriales). Un cambio de actitud. Los libros de Texto. Tenía listo un artículo sobre la independencia judicial pero he decidido que no es la línea que debo seguir en mis artículos.
Siempre he pensado que es muy fácil hacer arder un pajar, destruir es mucho más sencillo que construir, y por eso mismo no voy a dedicar mis escritos nunca más a criticar algo, en especial cuando son cosas que en mayor o menor medida ya sabemos todos. Seria para mi facilísimo poner a parir a las instituciones e incendiar más los ánimos con mis palabras, aunque en realidad solo aportaría un poco más de ruido. Me he propuesto ser creativo, imaginativo y constructivo. Para cambiar las cosas no basta con saber lo que no está bien, de hecho si lo piensas eso es lo más sencillo, para que realmente pueda haber un cambio lo primero que se necesitan son alternativas, y que se cree un debate público que obligue a los poderes públicos a tomar esas alternativas en serio.