Libros de blur. Marihuana Prensada?: La Paraguaya. Www.am.ub.edu/~carrasco/rudyard.html. Si (Rudyard Kipling) -------------------- Si puedes conservar la cabeza cuando a tu alrededor todos la pierden y te echan la culpa; si puedes confiar en tí mismo cuando los demás dudan de tí, pero al mismo tiempo tienes en cuenta su duda; si puedes esperar y no cansarte de la espera, o siendo engañado por los que te rodean, no pagar con mentiras, o siendo odiado no dar cabida al odio, y no obstante no parecer demasiado bueno, ni hablar con demasiada sabiduria... Si puedes soñar y no dejar que los sueños te dominen; si puedes pensar y no hacer de los pensamientos tu objetivo; si puedes encontrarte con el triunfo y el fracaso (desastre) y tratar a estos dos impostores de la misma manera; si puedes soportar el escuchar la verdad que has dicho: tergiversada por bribones para hacer una trampa para los necios, o contemplar destrozadas las cosas a las que habías dedicado tu vida y agacharte y reconstruirlas con las herramientas desgastadas...
Orfebrería y chamanismo: un estudio iconográfico del Museo del Oro. You Are Here: Personal Geographies and Other Maps of the Imagination: Katharine Harmon: 9781568984308: Amazon.com. Evolution: The Story of Life on Earth: Jay Hosler,Kevin Cannon,Zander Cannon: 9780809043118: Amazon.com. Capítulo 7... Rayuela... Julio Cortázar... Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja. Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio.