background preloader

Abril22

Facebook Twitter

Revolución Industrial. La Revolución Industrial o Primera Revolución Industrial es el proceso de transformación económica, social y tecnológica que se inició en la segunda mitad del siglo XVIII en el Reino de Gran Bretaña, que se extendió unas décadas después a gran parte de Europa occidental y América Anglosajona, y que concluyó entre 1820 y 1840.

Revolución Industrial

Durante este periodo se vivió el mayor conjunto de transformaciones económicas, tecnológicas y sociales de la historia de la humanidad desde el Neolítico,[1]​ que vio el paso desde una economía rural basada fundamentalmente en la agricultura y el comercio a una economía de carácter urbano, industrializada y mecanizada.[2]​ La Revolución Industrial marca un punto de inflexión en la historia, modificando e influenciando todos los aspectos de la vida cotidiana de una u otra manera.

Amadeo I de España. Amadeo I de España, llamado «el Rey Caballero» o «el Electo» (Turín, 30 de mayo de 1845-ibídem, 18 de enero de 1890), fue rey de España entre 1871 y 1873.

Amadeo I de España

Fue, además, el primer duque de Aosta. Su reinado en España, de poco más de dos años, estuvo marcado por la inestabilidad política. Los seis gabinetes que se sucedieron durante este período no fueron capaces de solucionar la crisis, agravada por el conflicto independentista en Cuba, que había comenzado en 1868, y una nueva guerra carlista, iniciada en 1872. Biografía[editar] Se casó en 1867 con María Victoria dal Pozzo della Cisterna, princesa de La Cisterna y Belriguardo, con quien tuvo tres hijos: Manuel Filiberto, II duque de Aosta, Víctor Manuel, I conde de Turín, y Luis Amadeo, I duque de los Abruzos. Fue masón, alcanzando el grado 33 del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.[3] Reinado en España[editar] Fue Amadeo el primer rey de España elegido en un Parlamento, lo que para los monárquicos de siempre suponía una grave afrenta. Motín de Aranjuez. El Motín de Aranjuez fue un levantamiento ocurrido entre el 17 y el 19 de marzo de 1808 por las calles de esta localidad madrileña.

Motín de Aranjuez

Se desencadenó debido a varias causas motivadas por la política de Manuel Godoy, secretario de Estado de Carlos IV. Causas[editar] La guerra contra el Reino Unido (1796-1802) había producido graves problemas económicos a España, pues los ataques a las flotas indianas provocaron la falta de materia prima provenientes de América; el bloqueo de Cádiz permitió a las colonias americanas comerciar por su cuenta, así como, la pérdida de fuerzas navales que defendieran las costas españolas. Tras la derrota de Trafalgar, la oposición al gobierno recayó fundamentalmente en las clases bajas. La presencia de estas tropas terminó por alarmar a Godoy. Motín contra Godoy[editar] Constitución española de 1812. La Constitución Política de la Monarquía Española, más conocida como Constitución española de 1812 o Constitución de Cádiz,[2]​ conocida popularmente como la Pepa,[3]​[nota 1]​ fue promulgada por las Cortes Generales españolas reunidas extraordinariamente en Cádiz el 19 de marzo de 1812.

Constitución española de 1812

Se le ha otorgado una gran importancia histórica por tratarse de la primera Constitución promulgada en España,[nota 2]​ además de ser una de las más liberales de su tiempo. Oficialmente estuvo en vigor solo dos años, desde su promulgación hasta su derogación en Valencia el 4 de mayo de 1814, tras el regreso a España del borbón Fernando VII.[5]​ Posteriormente se volvió a aplicar desde el 8 de marzo de 1820, cuando en Madrid (España), Fernando VII es obligado a jurar la Constitución española de 1812, estando vigente durante el Trienio Liberal (1820-1823), así como durante un breve período en 1836-1837, bajo el gobierno progresista que preparaba la Constitución de 1837.

Historia[editar] Siglo XIX. El siglo XIX d.

Siglo XIX

C. (siglo decimonoveno después de Cristo) o siglo XIX e. c. (siglo decimonoveno de la era común) comenzó el 1 de enero del año 1801 y terminó el 31 de diciembre de 1900. La característica fundamental de este siglo es la de ser un periodo de grandes cambios. Ciencia[editar] El desarrollo de medicina se relaciona directamente con los fenómenos migratorios, los hacinamientos en las ciudades y precarias condiciones de vida de la clase trabajadora propios de la Revolución Industrial. Las revoluciones burguesas, promotoras de ciudadanos librepensadores, construyen una nueva medicina científica y empírica, desligada de lo místico y artesanal.

Política[editar] En Europa el siglo XIX se caracterizó por el nacimiento de las democracias censitarias y el ocaso de las monarquías absolutas.[5] La Revolución francesa y la posterior era napoleónica ayudarían a expandir las ideas republicanas y liberales.